Contribuir a la felicidad a través del orgasmo vaginal y el punto G femenino

Hola Atrevidos! Sabéis que nuestra misión es contribuir a un mundo más feliz, a través de la amistad. Pensamos que una sexualidad plena y satisfactoria en pareja o en relaciones abiertas inciden sobremanera a encontrarnos más felices, por lo que tras consultaros en redes sociales si os parece afín esta temática a Atrévete Solo, y recibid vuestro apoyo, hemos redactado un artículo acerca del Orgasmo Vaginal para que los chic@s os hagan más felices!!!

Por muy increíble que parezca, la sexualidad femenina sigue siendo un misterio. Muchos chic@s saben que existe, pero no cómo estimularlo para que una mujer tenga un orgasmo vaginal en lugar de un orgasmo clitoriano.

Con este artículo, pretendemos arrojar un poquito de luz respecto al orgasmo vaginal.

Existen dos tipos de orgasmos:

1. El orgasmo clitoriano, mucho más fácil de alcanzar para las mujeres, (lo obtiene un 80% de las chicas). Se logra con mayor rapidez pero es más breve. Éste se consigue con la estimulación de la zona del clítoris y se siente un calorcito por la zona al alcanzarlo. Normalmente tras este orgasmo no apetece continuar la estimulación del clítoris y la mujer suele quedar satisfecha.

    

2. El orgasmo vaginal. Hay mujeres que opinan que no existe, dado que nunca lo han experimentado. Las que sí lo han hecho saben diferenciar perfectamente uno de otro. El orgasmo vaginal se logra bien mediante el coito en determinadas posturas o mediante la estimulación directa del interior de la vágina, concretamente del famoso Punto G. Es un orgasmo más intenso y en lugar de notar el calor sólo por la zona de la pelvis, algunas mujeres lo sienten de los pies a la cabeza. A algunas chicas se les pone la piel de gallina, otras sienten contracciones en la planta de los pies. Y Por lo general, las mujeres para llegar a él durante la penetración necesitan emplear más tiempo, pero suele ser más profundo e intenso y aporta un grado mayor de intimidad con la pareja.

El orgasmo vaginal va acompañado de la eyaculación femenina en mayor o menor grado, que suele mojar las sábanas.

Según se va estimulando el punto G, éste va creciendo. Cuando se estimula el punto G, éste va aumentando de tamaño y produce una sensación parecida a las ganas de orinar. Algunas mujeres se paran en este momento, pero si continúan, experimentarán un orgasmo intenso. Hay mujeres que tienen una eyaculación femenina con poca cantidad, sin embargo otras eyaculan una gran cantidad de líquido, que no es orina, sino que es más transparente que ésta y tiene un olor menos intenso. Algunas mujeres lo han confundido con orina creándole ciertos traumas al pensar que se hacen pis cuando llegan al orgasmo, deteniéndose antes de alcanzarlo cuando están con una pareja por lo que no llegan nunca a experimentarlo. Es recomendable hacer pis antes, para reducir esta sensación durante la penetración cuando están cerca del orgasmo vaginal.

Cómo alcanzarlo:

1. Mediante penetración. La postura más fácil para conseguirlo es la chica sobre el chico, inclinada un poco hacia adelante, ya que el pene estimula en mayor grado esta zona. Son pocas las mujeres que eyaculan una cantidad considerable de líquido, algunas sienten complejo por ello, pero todo lo contrario, esto suele excitar a los chicos, como símbolo de culminación del placer, al igual que la eyaculación masculina. Se pueden realizar juegos en este acto a gusto de la apertura de mentalidad de cada pareja.

   Mientras que el orgasmo clitoriano tiene una gran bajada de estímulo tras suceder, y normalmente requiere un tiempo sin estimulación directa, el orgasmo vaginal facilita una meseta de orgasmos en diente de sierra, facilitando la continuación del coito o masturbación, y posibilitando múltiples orgasmos en breves espacios de tiempo.

    

2. Mediante masturbación. El orgasmo vaginal se puede alcanzar fácilmente con la estimulación mediante uno o dos dedos. Requiere una estimulación previa, para que la mujer se encuentre ya excitada. Si no, es difícil encontrar la zona. El punto G tiene un tacto como una habita rugosa, es como una almohadita en la cara anterior de la vagina, a unos 5 cms de profundidad. El resto de la vagina tiene una textura lisa, por lo que nos facilita encontrarlo detectando esta rugosidad. Cuando apretamos en esta zona, la chica siente la sensación de que se hace pis, eso significa que lo hemos encontrado :) En este caso, se presiona esta almohadita rugosa con las yemas de los dedos a la vez que se produce un deslizamiento de las mismas sobre la superficie. Cada mujer es diferente y debemos explorarla de modo inquisitivo, prestando atención a su respiración, ademanes de placer, movimientos de su pelvis… leyendo su curva de placer.

    

Para conocer cómo mejor estimular a la chica, seas chico o chica, prueba a introducir con la palma de la mano hacia arriba uno o dos dedos en la vagina, y  cúrvalos hacia arriba, presiona el punto G, y sobre todo la parte final del mismo. Puedes actuar en 2 variables para buscar su máximo placer: por un lado, modificando la velocidad con la que frotas esta almohadita, y por otro lado aumentando la presión con la yema de los dedos, sobre todo en la parte final de la misma. Puedes mezclar velocidad y presión hasta encontrar el modo de maximizar su curva de placer. Si quieres potenciar más el placer, utiliza simultáneamente el pulgar para estimular el clítoris directamente o a su alrededor (según la sensibilidad de tu chica).

Finalmente, una vez conoces su curva de placer y el mejor modo de estimular su punto G. Si la chica ya está excitada, puedes conseguir llevarla a su orgasmo vaginal incluso en un minuto.

Esperamos que el artículo os ayude a poner (vosotras o vuestras parejas) caritas como ésta y que las endorfinas liberadas os hagan un poquito más felices :)
 

Si queréis aportar vuestra opinión o experiencia al artículo, será un placer compartirlo y aprender tod@s!!

Autor: Ángel Osuna Luque.